Por:
Que sea amoroso, leal, confiable y
servicial, que siempre esté a mi lado, que jamás me decepcioné, que nunca me
mienta o eluda mi presencia, que tenga siempre palabras de aliento y de apoyo
para mí, que sea cariñoso, tierno y comprensivo, que me escuche y me aconseje.
Que esté siempre disponible, que camine
junto a mí no solo acompañándome, sino ayudándome a llevar mis cargas, que
cuando por alguna razón tropiece y caiga, solidario me levante, me anime y me
conforte dándome fuerzas para seguir adelante.
Que salga en mi defensa cuando todos se vuelvan
contra mí, que permanezca conmigo cuando todos se hayan ido, que sin egoísmo
alguno me ofrezca todos sus recursos e inclusive me reciba en su morada…
Para compartir en este día tan especial,
el día internacional del amigo, seguramente deseas tú tener a alguien así a tu
lado quien esté siempre atento a todas tus necesidades emocionales y
espirituales e inclusive materiales, y desde luego, en realidad todos deseamos
que sean las anteriores y otras muchas más las cualidades de un amigo excepcional
y sin igual para compartir no solo en este día sino en todos y cada uno de los
instantes de nuestras vidas; sin embargo, siendo todos nosotros los seres
humanos falibles, bien sabemos que aunque podamos contar con excelentes amigos,
no existe en absoluto ninguno que sea perfecto y que esté a la vez en la disponibilidad
de todo el tiempo y de todos los medios para siempre podernos ayudar.
Como los seres sociales que somos cada
quien de nosotros nos relacionamos a diario con otras personas más y les
presentamos a ellas nuestros amigos, como hijos de Dios, tanto tú como yo
contamos con la amistad perfecta del Señor, quien dispone de todo el tiempo y de
todos los recursos para podernos ayudar, un amigo excepcional y sin igual, ¿qué
tal si se lo presentamos hoy a nuestros otros amigos también?
La Palabra de Dios, quien dio a su Hijo por
ti y por mí, dice:
“Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo
que yo os mando” (Cp. Juan 15:13,14).
¡Un muy feliz día del amigo!
